lunes, 27 de octubre de 2008

UNA AMPLITUD ESPERADA

En el encuentro más importante de St.Petersburgo, Andy Murray volvió a demostrar su poderío para poder defender con éxito su corona del 2007, levantar su octavo trofeo en singles como profesional y el quinto en este año (es el segundo jugador con más títulos después de Rafael Nadal). En el abierto ruso, el escocés se impuso al local Andrey Golubev por 6-1 y 6-1, en tan sólo 56 minutos.
Hay que tener en cuenta que Murray no solamente sumó su quinta celebración (antes Doha, Marsella, Cincinnati y Madrid) sino que, además, es una de las cinco raquetas en haber alcanzado los 50 triunfos en la actual temporada. De los últimos 19 matchs disputados, el británico se quedó con la victoria en 18 (perdió con Yen-Hsun Lu en Beijing).
Recordemos que Golubev provenía de la fase previa, así que arrastraba una importante cantidad de horas en cancha, lo que hizo que fuera la final más corta en este 2008 (la que le sigue es la que le ganó Mikhail Youzhny a Nadal en Chennai). El ruso se había adjudicado el challenger de Heilbronn, a principio de año, y había sido eliminado por David Nalbandian en la segunda ronda del US Open de este año (torneo en el cual Murray fue el finalista).
En cuanto a la definición del dobles, Travis Parrott y Filip Polasek sorprendieron a Rohan Bopanna y Max Mirnyi por 3-6, 7-6 (4) y 10-8 (Match TB).







La foto pertenece a la página oficial de la ATP

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